Por todo México se dejaron ver interesantes muestras de fe en torno a la semana santa. Días que recuerdan la cruel muerte de Jesús de Nazaret, personaje histórico, que sirvió para revolucionar la creencia religiosa de casi todo el mundo.
En Taxco de Alarcón Guerrero, año con año se vivió la tradición de más de 100 años, en durante la semana Santa, los encruzados salen a las calles, encapuchados de negro cargando pesados bultos de espino en su espalda.
Seguidos de los flagelantes quienes se golpean su dorso con cuerdas llenas de clavos. Estos personajes llevan las caras cubiertas con bolsas de tela color negro, y a manera de penitencia caminan las calles de Taxco, pueblo mágico.
Entre encruzados y flagelantes, deambulan también las almas en pena, o penitentes; mujeres que cargan pesadas cruces de madera, caminando agachadas con cadenas a sus pies. Estos personajes son mujeres del pueblo, que a manera de duelo y fe, penan por el pueblo deseando tener un año de salud, trabajo y prosperidad.
De esta manera se viven los días Santos en Taxco de Alarcón, días de guarda en que miles de turistas acuden a la capital de la plata en México, para vivir la pasión de un pueblo devoto.
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